Debido a diversas peticiones al correo electrónico (gmomarmota@hotmail.com) nos pidieron hablar sobre este libro del siempre oscuro Frederich Nietzsche. Tal vez un poco introductorio, Nietzsche durante toda su vida se caracterizo por su lejanía y misántropa conducta. Pero sin ahondar en la vida personal de Nietzsche podemos entender que su forma de pensar era siempre muy crítica.
En el inicio de "El Anticristo", Nietzsche empieza definiendo tres conceptos que van a sentar las bases de toda su crítica [sin mencionar el prólogo que es una sublime explicación de porque su libro no fue escrito para la gente de su época.], el alemán nos definirá primero ¿Qué es lo bueno? apelando a que lo bueno solo puede ser aquello que exalte al hombre y nada que lo degrade, el poder, el eterno progreso, la superioridad; proseguirá con ¿Qué es lo malo? hablándonos que es todo lo que proviene de la debilidad, la mediocridad, el fracaso, la miseria, bastante lógico ¿no?; el verdadero problema es cuando define el tercer concepto: ¿Qué es la felicidad? [he aquí el primer ataque] en palabras de Nietzsche "(...)Aquello que experimentamos cuando el poder y la fuerza aumenta en nosotros y nos sentimos señores, amos del mundo, cuando comprobamos que hemos superado aquello que nos oprimía, cuando libremente buscamos el porqué de las cosas, cuando somos protagonistas de nuestra historia personal y de nuestra época(...)"; todo parece tan lógico ya que la felicidad parece ser el concepto de bondad en Nietzsche pero totalmente extremista, empero la felicidad en Nietzsche contradice varios principios cristianos como el mismo lo va ha atenuar más adelante, verbigracia el de que todos los hombres somos iguales ante Dios, lo cual es un intento del cristianismo de cohibir a los "superhombres" [concepto de Nietzsche que significa todo lo bueno].
Nietzsche nos habla de manera concreta cuando señala lo siguiente: "(...)¿Existe algo más peligroso que cualquier vicio?: el cristianismo!, que es la compasión hacia todos los fracasados y los débiles [lo malo]. El cristianismo, con toda su doctrina y marionetas que lo dirigen, ha fomentado desde sus orígenes un tipo de hombre apocado, enfermo, pesimista, con el fin de inspirar misericordia y convertirse en dueño y señor de la humanidad(...)". El pensamiento sin duda va enfocado hacia según Nietzsche los "anti-valores" que fomenta el cristianismo, y es un ataque con argumentos bastante rigurosos hacia él. Nietzsche además señala que los mismos "valores" eclesiásticos han sido rotos por la misma iglesia, manteniendo así a los débiles y los mediocres bajo sus faldas. El pensamiento nietzschiano es fielmente nihilista. Durante el desarrollo del texto enfoca otros puntos de interés destacando que lo teólogos son los enemigos naturales de sus argumentos y cierra su interesante y atrevido discurso impulsando un pensamiento de revolución: "(...)¡Es increible que contemos el tiempo empezando por el día fatal en que comenzó esta desgracia: desde el primer día del cristianismo! ¿Y por qué no empezamos a contarlo a partir de su último día?... ¿A partir de hoy? ... ¡Transmutación de todos los valores!... "
Término comentando que el discurso que Nietzsche usa en su libro es bastante fundamentado pero no deja de contener cierto carácter manipulador, sin embargo es una joya del pensamiento occidental. Cualquier duda comentario o solicitud de la inclusión de algún tema ignorado que sea interés para beneficio del contexto promete ser contestado.
Dr. Trémolan y su equipo de trabajo
